miércoles, 20 de marzo de 2013

Agradecimientos

Y en este capítulo me toca agradecer a todos los que han contribuido a que mi viaje haya sido tan placentero y, en especial, a aquellos que se han convertido en amigos para siempre.

En cuanto al aspecto técnico del blog, agradezco la colaboración  prestada por las responsables del KZgunea de Irun, Ioana, que ya me ayudó con el anterior, y Virginia, que me resolvió un problema del Blogger, actualizando la carga de imagen. Muxus a ambas. Como las damas de KZgunea son cambiantes, cuando inicié este tramo de mi blog, también agradecía a Maitane y Alexandra que, ahora, tampoco olvido.

Agradezco también a Amparo Blanco, por lo bien que me cuidó las plantas durante mi ausencia y, cómo no, a mi familia, que me fue mandando noticias de ellos y de mis nietos, alegrándome el camino.

lunes, 4 de marzo de 2013

Retorno a casa II

62.02 (178) Retorno a casa II
20.08.08
Alicante-Irun

No hay mucho que contar de este viaje. Desayuno en el Café Damasol (4,90 €). La comida es obligada por la parada del bus en Monreal del Campo (13 €) y una menta poleo (1,25 €). Si os queréis molestar en comprobar los gastos que, como buen contable que fui, he ido reseñando a lo largo de este diario, os diré que la suma total es de 2.115,68 €, y eso que he ahorrado en camas, durmiendo al aire libre 45 noches.

Y como muestra de agradecimiento a mi amiga Amparo, la que me selló la credencial del Camino a Santiago, en Irun en 2006, saco foto de mis plantas que ha tenido la gentileza de regar durante este verano.










Y de nuevo a comenzar un año con la vista puesta en San Marcial, sobre el monte Aldabe, que disfruto desde mi apartamento.

Y a esperar que me vaya bien en el balneario, mi primera experiencia balnearia con el Imserso, en el de Fuentes del Trampal, Cáceres, en noviembre. Allí conoceré a Augusto, un grancanario que será también mi compañero el siguiente noviembre de 2009 en el balneario de Verche, en Valencia y que en enero me visitará en Caletillas (Tenerife), estando con el Imserso, y al que en primavera visitaré en su isla de Gran Canaria, en su casa de La Aldea de San Nicolás de Tolentino, del que guardo muy buenos recuerdos y del que no tengo noticias directas desde hace tiempo, aunque sí indirectas. Sé, por lo menos, que está vivo. La visita al balneario de Fuentes del Trampal, tendrá un aliciente añadido. ¿Recordáis el encuentro que tuve en Caños de Meca con una pareja de Talayuela, Cáceres? Pues, yo que pensaba que no iba a ir nunca por allí, al tocarme el balneario en su provincia, aunque Talayuela está casi lindando con Salamanca y El Trampal en la frontera con Badajoz, hicimos por vernos y pasé invitado dos noches en casa de Rufi y Toño. Un encuentro casual de mi camino que se convierte en amistad duradera.

Retorno a casa I

62.01 (178) Retorno a casa I
19.08.08 martes
Calas de Campoamor (Orihuela)-Alicante.

El asa de mi mochila se rompe del todo al subir al autobús. Fue un regalo con puntos Eroski y ya se puede decir que ha cumplido su cometido con el viaje por Portugal y éste. En el autobús, se sienta a mi lado una chica del estilo de mi compañera de trabajo, María, pero sólo es la apariencia, ya que ésta no es, ni con mucho, tan simpática como María. No hablamos en todo el camino. A veces, se me saltan las lágrimas por tan brusco final. El paso por Torrevieja se hace pesado. Pongo atención al llegar a las Salinas de Santa Pola; sus aguas casi tocan el firme de la carretera. La casa de Arantza y Martín, queda lejos y aquí dejo de escribir en mi diario.

Cuando llego a Alicante me voy a comer con Antonio (9 €). En una pastelería como un pastel y un café (5,30 €). Me voy en busca del albergue juvenil pero, después de lo que me cuesta encontrarlo, resulta que está en obras y tendré que pensar en otra forma de pasar la noche. Próxima al Albergue juvenil, veo una curiosa fuente, la plasmo en una instantánea y me voy en busca de cama. La encuentro en Pensión Casa Miguel y me costará 24 €. Dejo allí las mochilas y me voy a dar una vuelta por Alicante.








Fotografío el castillo-fortaleza que no se encuentra demasiado alejado, pero al que no pongo ningún interés en visitar. ¡Quizás en otra ocasión! Y, a pesar de los desvelos de mi amiga Gemma de ayer en La Llana y mi gusto por viajar en tren, debido a que no tengo billete en Renfe para mañana, decido coger billete de autobús a Irun (35,83 €).

Disfruto de un gin-tonic (4 €) y me voy a visitar el Mercado de Abastos que está muy cerca de la pensión.

Aquí mi diario se acaba, no es cuestión de relatar más un viaje caminando, cuando ya estoy en dique seco.

Mañana relataré sólo mi llegada a Irún.